TABLAS ICONOS – ENMANUEL CUSNAIDER. PASIÓN POR CRISTO – PASIÓN POR LA HUMANIDAD
OBRA PERCEPTUAL PINTADA CON DISTINTOS MATERIALES: ACRÍLICO Y ÓLEO. BÚSQUEDA DE UNA EXPRESIÓN DEL CARISMA DE MANERA DIFERENTE, ACTUAL. LENGUAJE MODERNO.
María Rivier, a la que llamarán Marinette, en su familia; nació el 19 de diciembre de 1768 en Montpezat, Francia. A finales de abril de 1770, Marinette, con 16 meses se queda inválida a causa de una caída y padeció raquitismo también. Por ello, ya de adulta no sobrepasará el metro y treinta y dos centímetros de estatura.
La señora Rivier, madre de María Rivier y mujer de una gran fe, lleva a Marinette todos los días ante la imagen de Nuestra Señora de la Piedad y la niña, que ve rezar a su madre, adquiere pronto una certeza indestructible ¡La Santísima Virgen me curará! decía. Dejada a solas a los pies de María con su hijo muerto en brazos, Marinette contempla ese misterio de amor apasionado, se graba en su corazón. ¡Milagro! El 8 de septiembre de 1774, Marinette empieza de repente a andar. Esos cuatro años de “escolaridad” ante María marcarán para siempre la vida de María Rivier. A los 18 años, María Rivier se consagra sin escatimar esfuerzos a la evangelización y al cuidado de los pobres. Abre una escuela en pleno periodo del Terror, los sacerdotes son perseguidos, todo acto religioso es considerado sospechoso. María Rivier organiza en secreto las asambleas del domingo. Ella se hace más precavida, pero continúa su ardiente apostolado. En 1794 se siente llamada al pueblecito de Thueyts. Allá va. Pronto cuatro jóvenes, escasas de haber y de saber, se unen a ella y se dejan ganar por el fuego del Evangelio.
En un momento en que todos los conventos cierran, María Rivier va a abrir el suyo. El 21 de noviembre de 1796, fiesta de la Presentación de María en el Templo, María y sus cuatro compañeras se consagran a Dios. La nueva comunidad que vive en la indigencia más completa, a pesar de ello, no tarda un multiplicarse. Para María Rivier y sus hijas, la educación cristiana de la juventud es y será siempre una prioridad. Sin embargo, la educación de la fe se extiende también a los adultos. Los pobres son sus preferidos. A María Rivier nada la frena en su ardor apostólico, se expresa con una claridad, una energía, un fervor que van directos al corazón. Una fuerza interior la sostiene y la lleva a exclamar: “Me gustaría tener mil cuerpos para poder ir a trabajar y dar a conocer a Cristo.” “Sed un evangelio abierto donde se pueda leer a Jesucristo.” A su muerte el 3 de febrero de 1838, ese apóstol de ardiente corazón había fundado 141 casas y recibido más de 350 hermanas para continuar su obra.
María Rivier, profeta de nuestro tiempo, fue beatificada en Roma por el Papa Juan Pablo II el 23 de mayo de 1982. Hoy sus hijas se encuentran en 20 países del mundo
Su fuego apostólico se extendió, mucho más allá de su imaginación, en la Francia del siglo XVIII. A su muerte en 1838, esta pequeña mujer de Dios discapacitada, María Rivier, había fundado 141 escuelas en la región montañosa del Ardèche. Su ejemplar compromiso misionero al servicio del Evangelio se ganó el corazón del Papa Pío IX, que en 1853 la proclamaba Mujer Apóstol.
Hoy, la misión de la Mujer Apóstol encuentra su pleno desarrollo en la creatividad y el ingenio de sus hijas. Con fidelidad creativa, las Hermanas de la Presentación de María se encuentran en diferentes partes del mundo, exactamente en 20 países. Su misión de dar a conocer y hacer amar a Jesucristo ha adquirido muchos rostros en los 225 años de existencia. Mientras exista un rincón de tierra donde Jesucristo no sea conocido y amado, las hijas de la Mujer Apóstol no podrán descansar.
La Congregación de las Hermanas de la Presentación de María fue creada oficialmente el 21 de noviembre de 1796. María Rivier y sus cuatro primeras compañeras se consagraron a Dios, bajo la advocación de la Presentación de María, no sólo ellas, sino también la Congregación, sus alumnas, su casa y sus obras. Se consagró en secreto debido a la persecución que sufrían en ese tiempo las congregaciones religiosas. Fue un día importante y lleno de alegría. La Congregación toma este nombre por la festividad del día, María Rivier ve una gran similitud en el significado profundo de la fiesta con lo que ella sueña para las hermanas. Cuenta una tradición muy antigua, -el Protoevangelio de Santiago-, que cuando la Virgen María era muy niña, sus padres, San Joaquín y Santa Ana, la llevaron al templo de Jerusalén y se la presentaron a Dios en agradecimiento por su nacimiento y en ofrecimiento para su consagración.
Actualmente las hermanas de Presentación de María tienen centros en España: Vitoria, Donostia, Urnieta, Muskiz, Madrid, Córdoba y Peñarroya; También en otros países del mundo como Canadá, Estados Unidos, Perú, Brasil, Japón, Filipinas, Francia, Portugal, Italia, Inglaterra, Irlanda, Senegal, Mozambique, Gambia, Ganha, Burkina Faso, Camerún, etc.
Algunas declaraciones importantes:
Recojamos algunas palabras de Juan Pablo II sobre la Beatificación de esta “Mujer Apóstol”:
Miremos ahora a la Beata María Rivier, a quien Pío IX ya llamaba la “mujer-apóstol”. De hecho, fue el ardor de su apostolado lo que impresionó a todos sus contemporáneos, durante y después de la Revolución Francesa. Apasionada desde niña por la idea de instruir a los pequeños, de enseñarles, como una “madrecita”, a amar a Dios, fundó mucho más tarde las Hermanas de la Presentación de María, especialmente para educar a los jóvenes a vivir en la fe; privilegiando a los pobres, a los huérfanos, a los que están abandonados o no conocen a Dios. No solo une a las jóvenes, sino que quiere “formar buenas madres”, convencida del papel evangelizador de las familias y de la importancia de la iniciación religiosa desde la primera infancia: “¡La vida está en las primeras impresiones!”, dijo: Ha sido considerado como un “cosechador de innumerables almas” …
Se ganó el título de Mujer Apóstol por su pasión, por enseñar a amar a Dios a sus niñas, por haber sido una educadora de las jóvenes en la fe cristiana. Un apóstol incansable de Jesucristo. Por ello, el Papa afirma que ha sido una cosechadora de innumerables almas, y es cierto por sus colegios han pasado cantidad de chic@s a las cuales las Hermanas les han infundido un gran amor hacia el Señor y hacía la Santísima Virgen.
La Escuela Francesa de Espiritualidad del Cardenal Pierre Bérulle ha tenido una profunda influencia en el desarrollo espiritual de la Congregación. Como Fundadora, María Rivier fue formada profundamente por su guía espiritual, el Sr. Pontanier, un sacerdote sulpiciano. Estos aspectos de esta escuela, encontraron su cumplimiento en la vida de María Rivier. Lo vemos en su unión con los misterios de Jesucristo, en su amor a la Virgen María, la Cruz, el Evangelio, la Iglesia, la Eucaristía, las Bienaventuranzas, los pobres, los niños y los jóvenes.
Aquí, algunas enseñanzas espirituales que, aunque fueron dadas a Hermanas religiosas, nos sirven también a nosotros en nuestro camino de santidad:
Sobre la Oración: “Aprended a conversar con Dios en lo más profundo de vuestro corazón” (María Rivier)
Ora en todo momento, cuando estés solo y en medio de la multitud. Limitar nuestra relación con Dios a momentos puntuales, a espacios concretos, a liturgias, es desgajar a Dios de la vida, es separarlo, de manera que lo convertimos en un Dios a nuestra medida y su mensaje pierde sentido. Dios habita en todas las personas. Vive intensamente esa presencia de Dios, reconoce la presencia de Dios en cada minuto y en toda circunstancia. Somos presencia de Jesucristo. (Libro “Todo por Amor” pág. 33)
Imitadores de Cristo: “Que nuestra vida sea un Evangelio abierto donde la gente pueda leer a Jesucristo”. (María Rivier)
Una tarea preciosa la de vivir el Evangelio, la de hacer posible vivir en la tierra como en el cielo. Ser Evangelio es ser Palabra de Dios viva, es encarnarse para ser Buena Noticia y encender corazones. María Rivier nos recuerda dónde reside lo importante, lo que da razón a la vocación de la Presentación de María. Es el mensaje de Jesús, un mensaje de amor en el que las personas son el centro. Llamados a ser, a vivir desde nuestra esencia, lo que somos: imagen y semejanza de Dios. (Libro “Todo por Amor” pag 49)
Apostolado: “Mientras haya un rincón en la tierra donde Jesucristo no sea conocido y amado, no descansaré.” (María Rivier)
Pasión por anunciar, por llevar la Buena Noticia de Jesús. El espíritu de Evangelio que arde en el interior de María Rivier la empuja a anunciar a Jesús en cualquier parte, en cualquier momento y a todo el mundo. Ella habla de lo que hay en su corazón, de la vida que la mueve por dentro. Su anuncio es claro con palabras sencillas y cercanas que todo el mundo entiende, porque ese es su mayor reto: conectar con todos sin excepción. No habla de lo que no conoce. Todo lo que dice antes ha pasado por su corazón, lo ha rezado y ha dejado que le traspase la vida. Esa es la diferencia entre hablar de una teoría o de una experiencia. María Rivier toca el corazón de las personas porque transmite vida y eso siempre transforma, hace pensar, invita a camina (Libro “Todo por Amor” pág. 57)
Conocer a Cristo: “Estudiad a Jesucristo, amad a Jesucristo, imitad a Jesucristo, dadle a conocer y hacedle amar en todas partes.” (Escritos espirituales pág. 16)
Fundamentalmente en la enseñanza escolar, pero también como cristianos activos en una vida parroquial, podemos dar a conocer a Cristo en las catequesis, en el internet, en todos los sitios donde vayamos, por ello para poder hablar de Cristo, es necesario estudiarlo e imitarlo. Nada mejor que vivir como otros Cristo, ya lo dijo San Pablo “Sed imitadores míos como yo de Cristo” 1 Cor 11,1.
Las cruces en esta vida: “No cesamos hija mía de bendecir al Señor en las cruces, las penas y contrariedades permiten que experimentemos sin cesar de una manera o de otra, acordémonos de que Jesucristo dijo a los Apóstoles: seréis perseguidos por amor de mi nombre… Todos los santos se han santificado por este mismo camino. Todas las fundaciones no han cesado de tenerlas, y es que siempre me ha llenado de la mayor confianza porque la obra de Dios está siempre marcada por la cruz y triunfan difícilmente.” (Escritos espirituales 181).
En la vida de Santa María Rivier siempre existieron cruces desde las físicas: enfermedades, minusvalías, hasta otras espirituales (tiempos de persecuciones a órdenes religiosas, divisiones, etc.) pero ella todas esas cruces las afronto con confianza, con la fe y esperanza de una digna hija de Dios. Este ejemplo de enfrentar el sufrimiento tanto físico como espiritual debe ser modelo tanto para los religiosos como para los laicos.
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María Rivier nació en Montpezat – Sous- Bauzon, el 19 de diciembre de 1768. Sus padres eran cristianos. Fue bautizada en la iglesia de Nuestra Señora de Prévenchères, dos días después de su nacimiento, el 21 de diciembre de 1768.
En el seno de una familia cristiana unida, experimentó el calvario de la enfermedad. Su madre, una mujer de gran fe, acompañó a su hija a los pies de Nuestra Señora de la Piedad. Allí nació una complicidad, entre la Virgen María y María Rivier, que haría decir a Marinette: «Todo lo conseguí con rosarios».
Durante cuatro años, estuvo en la escuela de María. Siguiendo su ejemplo, se convirtió en una mujer de esperanza, en una educadora de la fe, en una discípula de Jesús y en una madre para todos los que le fueron confiados.
El 8 de septiembre de 1774, se curó de su caída… Y fue allí, donde reunió a sus primeros alumnos, para enseñarles y hablarles de Jesucristo.
Se fue a Thueyts, llamada a abrir una escuela en 1794. Y con otras 4 jóvenes, el 21 de noviembre de 1796: Fiesta de la Presentación de María, hicieron su promesa al Señor. Se funda la primera comunidad y la primera casa madre de la Congregación.
Muchas otras jóvenes se unirían a estas mujeres en su deseo de enseñar y proclamar a Jesucristo. Al mismo tiempo, abrieron un pequeño dispensario para ayudar a los enfermos y a los pobres. De 1794 a 1814, las Hermanas de la Presentación de María abrieron 77 escuelas en el sur de Francia.
La casa de Thueyts se quedó pequeña para las hermanas,los huérfanos. y los alumnos. En 1814, Marie Rivier compró el antiguo convento de la Visitación para convertirlo en la Casa Madre de las Hermanas de la Presentación de María. Allí murió el 3 de febrero de 1838, tras haber abierto 141 escuelas, dispensarios, orfanatos e internados que se extendieron desde Saboya hasta Burdeos. Y profetizaba: «Un día mis hijas cruzarán los mares. «
La historia de la vida de María Rivier es casi sólo la historia de su devoción a la Virgen, de una reciprocidad ininterrumpida de confianza y de favores, de oraciones y de gracias obtenidas por la intercesión de la Virgen María. Sus experiencias infantiles son el punto de partida de esta maravillosa historia de reciprocidad de amor que permite a la gloria de Dios transformar su incapacidad física en una vida de Santo Amor.
Tomemos tiempo para pasear por el jardín de la vida de María Rivier. Esperamos que este recorrido sirva para suscitar en nosotros fervor y confianza y para profundizar nuestro amor a Dios y a los demás. El perfume de las florecillas de María Rivier se eleva hacia Dios, invitándonos a compartir su belleza transformadora a medida que vivimos el lema, ¡TODO POR DIOS! ¡TODO POR SU SANTO AMOR!
OBRA PERCEPTUAL PINTADA CON DISTINTOS MATERIALES: ACRÍLICO Y ÓLEO. BÚSQUEDA DE UNA EXPRESIÓN DEL CARISMA DE MANERA DIFERENTE, ACTUAL. LENGUAJE MODERNO.
Hoy hace un año que nuestra Fundadora María Rivier fue proclamada Santa por el Papa Francisco.
Marie Rivier, fundadora de la Congregación de las Hermanas de la Presentación de María, será canonizada el próximo 15 de mayo.
En un momento en que todos los conventos cierran, María Rivier va a abrir el suyo. El 21 de noviembre de 1796, fiesta de la Presentación de María en el Templo, María y sus cuatro compañeras se consagraron a Dios.
Queremos felicitaros el día de nuestra Fundadora María Rivier con una infografía que representa la línea del tiempo de nuestra Congregación PRESENTACIÓN DE MARÍA. Tiene 3 partes:
Hoy 13 de diciembre, el Papa ha autorizado la promulgación del decreto de canonización de María Rivier, nuestra fundadora.
“La pasión por Jesucristo que ardia en el corazón de María Rivier,
vive todavía en nuestra congregación.
Que esta pasión abrase también nuestros
corazones y nos haga contagiar a Dios”
(Mensaje del XXV Capítulo General)
RETIRO “CONSAGRADAS PARA LA VIDA DEL MUNDO”
PENTECOSTÉS ES EL DIOS INVISIBLE…
VIGILIA PREPARACIÓN PENTECOSTÉS Y ANIVERSARIO DE LA BEATIFICACIÓN. ROSARIO.
COLGAR CON UNA PEQUEÑA CELEBRACIÓN CUADRO MR – VITORIA